La cena no necesita muchos ingredientes sofisticados para ser satisfactoria. Si ha revisado su repertorio de recetas económicas y está buscando algo de inspiración, Rachael Ray es una defensora de las humildes patatas fritas congeladas. Mientras que algunos chefs famosos evitan los alimentos procesados congelados, Ray los acepta. La reina de las comidas de 30 minutos las usa como atajo para cuando no quiere pasar por el proceso de hacer papas fritas desde cero, y también prepara comidas en torno a ellas.
Las patatas son ricas en nutrientes, ricas en carbohidratos complejos y fibra, y tienen un alto contenido de agua. Esto significa que son una potencia sustancial que te hace sentir más lleno después de consumirlos. Sin embargo, las patatas pueden ser una especie de “meh” sin un poco de ayuda, y cuando se transforman en patatas fritas, se vuelven excepcionalmente sabrosas. Algunas de las mejores papas fritas congeladas pueden ser un acompañamiento o un refrigerio satisfactorio, especialmente si les das un toque casero, como lo hace Ray. Ya sea que quieras hornear o freír esas papas fritas o usar papas fritas arrugadas o con poco dinero, el primer paso es asegurarte de que estén crujientes y doradas por fuera y esponjosas por dentro. A partir de ahí, el cielo es el límite.
Úsalos con las sobras
Rachael Ray tiene muchas versiones de este plato de papa para las noches ocupadas entre semana o los fines de semana tranquilos. A ella le gusta mejorar sus papas fritas congeladas con condimentos, especias y hierbas para crear un bocado delicioso. Desde papas fritas con sabor a pepinillos rociadas con vinagre de malta hasta aquellas con un poco de picante y servidas con aderezo ranch, hasta papas fritas con ajo y parmesano con salsa marinara para mojar, la autora del libro de cocina usa su imaginación culinaria para realzar el sabor y terminarlas con una salsa que combine con su tema.
Ray incluso tiene una versión de papas fritas congeladas de macarrones con queso. Ella prepara papas fritas con queso horneándolas y vertiéndolas con una salsa de queso casera que comienza con un roux. Ella señala que también puedes servir la salsa a un lado si lo prefieres. Si desea agregar un poco de proteína, espolvoree trozos de tocino o tocino picado sobre ellos. Si tienes un poco de brócoli, agrega un poco a la salsa de queso. Es una excelente manera de hacer que los niños coman verduras.
Las patatas fritas congeladas también son la base perfecta para las sobras. Crea un plato de papas fritas cargadas con los restos de carne de taco, queso rallado, jalapeños, aceitunas negras, guacamole, salsa y crema agria. O tome papas fritas congeladas preparadas y agréguelas a las ensaladas para crear un plato abundante que aún tenga muchas verduras.
